La época de calor empieza a culminar, pero hay que seguir estando alerta a los mosquitos.
Si comparten un momento al aire libre en el jardín de la casa, hay que aplicar repelente. La gran pregunta de muchas madres es ¿Cómo?
Lo más recomendable es pasárselo a tu hijo con tus manos para que no le entre en la boca ni en los ojos. Otro tip, es que si es todavía es chiquito no le pongas en las manos, por sí se las lleva a la cara.
Una vez que le aplicas el repelente, el producto tiene que quedar fuera de su alcance por si les interesa tomarlo para jugar y que no se lo pongan ellos mismos.
A tener muy en cuenta que los mosquitos pueden transmitir virus peligrosos como el dengue, chikungunya o zika.