En el caso de que el bebé muerda, la lactancia se puede complicar, ya que como mamás estamos tensionadas por temor a que vuelva a pasar.
Existen motivos por el que tu hijo puede morder el pezón cuando le estás dando la leche. Una alternativa, y la más frecuente de todas, es la dentición ya que luego de unos meses se empiezan a formar los primeros dientitos en la boca de los chicos.
Aunque puede ser una alerta de que el bebé está resfriado o con infección en el oído, ¿por qué ocurre esto? Porque la nariz se tapa y no puede tragar, o también porque el recién nacido está cansado, estresado o porque solo pretende llamar la atención de su madre.
¿Qué hacer para solucionar el problema? Mirar muy bien si el bebé está prendido correctamente al pecho, esto hará que evite morder el pezón. En el caso de que el pequeño esté resfriado, hay que acomodar al bebé en una ubicación más vertical y de esa manera podrá mejorar la respiración.