Hay tres técnicas que deben tenerse en cuenta y que pueden ser aprendidas en cursos preparatorios para la maternidad: la respiración abdominal, la respiración inferior (jadeo) y el pujo.
La respiración abdominal es fundamental para que las contracciones más intensas sean más “livianas” cuando empieza a dilatarse el cuello uterino. Para llevarla a cabo se toma mucho aire por la nariz, de esta forma se llenan los pulmones y el abdomen se hincha, luego se larga el aire por la boca.
El jadeo sirve para el control de las ganas de pujar en el periodo de dilatación y expulsión. El aire, tomado antes, se expulsa en forma de jadeo, la manera más aconsejable es hacerlo con la nariz y luego con la boca. Los ojos cerrados son una recomendación muy útil para no sufrir mareos.
La última técnica es el pujo. Tras tres inspiraciones cortas pero profundas de aire, se debe mantener la respiración mientras se contraen los músculos del abdomen, luego se relajan los músculos del periné y se lleva adelante el pujo.
¡No dejemos pasar estas técnicas!… Más que nada si es tu primer embarazo, a no dejar de lado las recomendaciones y a tenerlas en cuenta para un mejor parto.